El reciente Festival del Día de las Madres en una escuela privada de Hermosillo ha causado revuelo en las redes sociales debido a la inesperada participación de un joven “stripper”. El incidente ha llevado al protagonista, quien se identifica como Pavlo Durazo, a romper el silencio y abordar el tema a través de un video en sus redes sociales. Consciente de la atención que ha recibido, Durazo menciona su intención de capitalizar la situación para aumentar su base de seguidores, la cual ya alcanzaba los 39 mil en el momento de la publicación del video.
Aunque Durazo afirma ser un creador de contenido relacionado con el fitness y no un bailarín erótico, justifica su participación en el festival argumentando que no es ajeno a quitarse la ropa en público, dado su historial como modelo y su participación en concursos de fisicoculturismo.
El joven, bajo el alias de Pavlo Durazo, menciona sus aspiraciones de debutar como peleador, una meta que espera alcanzar este año o el próximo, dependiendo de su entrenamiento.
La controversia en torno al festival no es el único punto de crítica hacia la institución educativa. Usuarios en redes sociales han recordado un caso previo de abuso contra una estudiante y han cuestionado el manejo que la institución dio a dicho incidente.
Este nuevo episodio ha avivado el debate sobre la responsabilidad de las instituciones educativas en la selección y supervisión de eventos escolares, así como en la protección y bienestar de sus estudiantes.